Cuenta la leyenda (no sé si apócrifa) que Dominguín, después de haber yogado ... con la mujer más bella del mundo, la frutal y estatuaria Ava Gardner, abandonó el campo de plumas y corrió a vestirse. Mientras se hacía el nudo de la corbata ante el espejo, la condesa descalza le preguntó, perpleja: «¿Se puede saber adónde vas?». A lo que el maestro respondió, con natural desparpajo: «¿Adónde voy a ir? A contárselo a los amigos».
DuboutAprès une nuit voluptueuse avec Ava Gardner, le matador bondit hors du lit et se rhabille au plus vite. Ava Gardner : « On peut savoir où tu vas ? Luis Miguel Dominguin : Où je vais ? Mais tout raconter à mes copains ! »
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